Parajes
Corazón de Jesús y Vía Crucis
Dejando el Santuario, en la carretera dirección a Aledo, a la izquierda nos encontramos con el paraje del Ángel. Una pequeña carretera asfaltada que la inicia la escultura de un ángel nos llevará por un magnífico Vía Crucis hasta la cima del Balcón y observaremos cómo una gran escultura del Sagrado Corazón de Jesús abre sus brazos hacia el valle para proteger a la ciudad de Totana y su entorno. Desde aquí podremos observar unas magníficas vistas de la depresión del Guadalentín y, en días claros, otear cómo el Mediterráneo baña las costas de Mazarrón.
El Vía Crucis monumental de La Santa es obra del escultor Anastasio Martínez Valcárcel. Se inauguró el 25 de octubre de 1970. Se compone de 14 estaciones con un total de 32 esculturas realizadas en piedra blanca artificial, con un estilo tendente a la abstracción. El escultor colocó las estaciones buscando los lugares más idóneos del paisaje: una colina apartada, una escarpada ladera, un pino majestuoso o cualquier otro elemento. Así pues podríamos decir que el Vía Crucis se integra en el paisaje.
Los grupos escultóricos que lo componen son los siguientes:
1. Jesús es condenado a muerte.
2. Jesús carga con la cruz.
3. Primera Caída.
4. Jesús encuentra a su Santísima Madre.
5. Simón el Cirineo le ayuda a llevar la Cruz.
6. Jesús es despojado de sus vestiduras.
7. Segunda Caída.
8. Las mujeres de Jerusalén lloran por Jesús.
En este punto nos encontramos con un friso en altorrelieve de Santiago a caballo, obra del mismo escultor, que anteriormente realizó para La Santa.
9. Jesús cae por tercera vez.
10. La Verónica.
11. La Crucifixión.
12. Jesús muere en la cruz.
13. El cuerpo de Jesús es bajado de la cruz.
14. El cuerpo de Jesús es colocado en el sepulcro.
Virgen Blanca
Saliendo del Atrio de la Ermita, se sube por las escaleras de la izquierda en dirección a La Fuente de los Cuatro Caños. Se continúa por el sendero superior durante unos 600 m hasta llegar al mirador de la “Virgen Blanca”, donde se observa flora autóctona (acebuche, lentisco, encina, pino carrasco,...) y una antigua torre eléctrica reconvertida en palomar. Allí se acoge a esta ave, símbolo del Santuario, pues según cuenta la tradición una paloma apareció para indicar el lugar donde debía ser construida la ermita.
La Virgen Blanca, que se corresponde con una imagen de la Dolorosa, se halla a 610 m de altitud. Desde aquí se observa el paraje del área recreativa del “Grifo”, la zona del “Estrecho” y una amplia panorámica del Eremitorio y del valle. Se puede continuar siguiendo el sendero principal de subida hasta alcanzar el camino asfaltado que nos conducirá hasta el Arco de Totana (construcción del s. XVIII para abastecimiento de agua potable); o bien volver desde la carretera, pasando junto a la zona de “El Grifo”, hasta el Huerto de la Santa (poblado de olivos ancestrales y en el que antaño existía un huerto medieval) y desde allí al Atrio, a la puerta misma del Santuario.